¿Quieres comprar un tensiómetro de calidad, preciso, y a un buen precio? Entonces te recomendamos que te hagas con un tensiómetro riester.
Esta marca colabora distribuyendo todo tipo de aparatos de atención médico a zonas remotas y poco desarrolladas de a lo largo de cualquier parte del mundo; siempre apostando por la más alta calidad, así como por lo último de lo último en cuanto a tecnología se refiere. No solo confeccionan tensiómetros, si no que también tienen en su stock otoscopios, oftalmoscopios, linternas… y mucho más.
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Este tensiómetro de la marca Riester consigue una óptima precisión a la hora de obtener las mediciones. Se ha diseñado con una membrana muy resistente a sobrepresiones (hasta alcanzar el valor de 600 mmHg), con una tolerancia de error asociada de +- 3 mm/Hg. La estructura también cuenta con un microfiltro que proteger la válvula de purga de aire y el sistema de medición. Además, gracias a la presencia de una membrana endurecida especial de material cobre-berilio, el mecanismo de presión no se deteriorará.
Aunque si bien es cierto que requiere de algunos conocimientos para conseguir la más alta precisión, los resultados han sido validados por BHS para uso clínico, lo que nos indicará que los resultados son muy exactos. Además, se ha eliminado el látex del aparato, lo que nos permite un uso sin que se produzca ningún tipo de intolerancia o alergia por parte del paciente.
Trae un estuche con cremallera de vinilo para facilitar el transporte al máximo.
La marca está tan convencida de la calidad del aparato que nos ofrece hasta 5 años de garantía sobre la calibración.
El siguiente modelo de este listado de los mejores tensiómetros de Riester es muy similar al anterior, con la particularidad de que el color es gris, es un poco más económico, y tiene unas prestaciones.
La estructura está formada también por una membrana capaz de resistir sobrepresiones, hasta llegar a los 600 mmHg, con una máxima tolerancia de error de+- 3 mmHg. Integra una membrana endurecida especial de cobre-berilio, con un mecanismo de presión que prácticamente no envejecerá.
También trae un microfiltro que protege la válvula de purga de aire y sistema de medición.
Ofrece una escala línea de lectura fácil con 64mm de diámetro, de 0-300 mmHg.
Cómo en el caso anterior, también ha sido validada por la BHS, permitiéndonos conseguir la máxima precisión posible. Tampoco integra látex, siendo así respetuoso con cualquier tipo de usuario.
El peso del dispositivo es muy ligero, y es que es de tan solo 372 gramos. No solo resultará sencillo de utilizar por ello, si no que al mismo tiempo lo podremos transportar fácilmente de un lado a otro, a dónde necesitemos.
La tercera propuesta que ofrecemos es este tensiómetro, capaz de resistir a sobrepresiones de 600 mm/Hg, con una precisión de +- 33 mm/Hg. Cómo parece ser cómo en la mayoría de los tensiómetros de Riester, la estructura también consta de una membrana endurecida especial de cobre-berilio, con un mecanismo de precisión que no envejecerá. Tiene un microfiltro especialmente preparado para proteger la válvula de purga de aire, además del sistema de medición.
El brazalete se adapta a una circunferencia de brazo de entre 24 y 32 cm, para tamaño adulto, y con velcro para evitar que se pueda soltar o ser impreciso durante la medición. Es decir, que se adaptará a la mayoría de los brazos, incluso hasta a los más musculados.
También se ha validado por la BHS para utilizarlo a nivel clínico. No tiene látex o cualquier otro material que pueda ser incompatible por algún motivo.
Su peso es ligero, de 545 gramos. Aunque no se indica el tamaño exacto a lo largo de la ficha técnica, te podemos asegurar que ocupa lo justo.
Tensiómetro aneroide diseñado de tal forma que pueda conseguir la más alta precisión posible en las mediciones. La marca está tan segura de su duración que indica que podemos tenerlo de por vida. Su carcasa es metálica, con un cromado brillante y cuenta con base de válvula metálica. La pera es de látex, con válvula de purga cromada y cuenta con una válvula de purga de precisión, con ajuste fino y sin desgaste.
En relación al conector, este es metálico, para facilitar el intercambio de brazaletes de manera rápida y sencilla.
Cuenta con una membrana resistente a sobrepresiones de hasta 600 mmHg, con una máxima tolerancia de error de +- 3 mmHg.
La escala lineal es de aluminio de 49 mm, perfectamente legible hasta alcanzar los 300 mmHg.
Además, todo se presenta en una cómoda bolsa de vinilo con cremallera, para que resulte fácil de llevar a dónde lo necesitemos.
Y todo esto lo puedes conseguir por un precio de producto de lo más económico, con la salvedad de que los gastos de envío se deben de abonar de manera adicional.
Y terminamos con este modelo de Riester, que tampoco tiene nada que envidiar a los demás. La carcasa es de aluminio, con un diámetro exacto de 64mm. Su membrana es plenamente resistente a sobrepresiones de hasta 600 mmHg, e incluye microfiltro para proteger válvula de purga de aire y sistema de medición.
También cuenta con una membrana endurecida especial de cobre-berilio y un mecanismo de precisión que prácticamente no envejecerá.
Ha sido validado por la BHS para uso clínico, consiguiendo una precisión a la hora de hacer las mediciones.
De la misma manera que cualquier modelo de la marca, este tiene un peso muy ligero (de tan solo 400 gramos), permitiéndonos un fácil manejo y tenerlo siempre listo para llevarlo a donde lo podamos llegar a necesitar.
El error asociado a su manejo es de +- 3 mmHG y se ha diseñado en Alemania.
Si prestamos atención a las opiniones sobre este artículo, descubriremos que la gran mayoría de ellas son muy positivas, por lo que realmente merece la pena hacer la compra. Es fiable, pertenece a una marca de calidad, y es muy económico.
Un tensiómetro es un equipo muy sencillo de usar, y que nos ofrece una elevada precisión, por lo que se considera una buena opción para todos aquellos que tienen que controlar su presión arterial, como un deportista que quiere evitar cualquier problema de salud, o una persona de edad avanzada con ciertas dolencias de carácter cardiovascular.
Cómo ya sabemos, la compra de un tensiómetro no es algo muy sencilla de realizar; existen tantos y tantos tipos diferentes, que elegir uno que se adapte a lo que queremos puede darnos más de un dolor de cabeza.
Es por esta razón, por la que te traemos esta guía que te ayudará a solucionar todas tus dudas.
Los tensiómetros de brazo manuales (también conocidos como analógicos o esfigmomanómetros), son los más simples, aunque también los más precisos. Para poder utilizarlos, se utiliza un manómetro, un estetoscopio y un brazalete que se infla. De esta manera, se pueden comprobar los sonidos diastólicos y sistólicos, cruciales para determinar las presiones arteriales máximas y mínimas. Un Riester tensiómetro de brazo manual tiene la característica de conseguir unos valores mucho más precisos… sin embargo, son más complejos de usar; el usuario tendrá que disponer de una cierta destreza.
Es el tipo de tensiómetro más sencillo de usar en estos momentos; tienen una operación muy simple, lo único que habrá que hacer es colocar el brazalete o el manguito en la zona adecuada y pulsar un botón. A la hora de comprar este tipo de tensiómetro, es crucial analizar el porcentaje de error que tiene; cuando mayor sea, menos fiable será la medición.
Finalmente, también tenemos los tensiómetros de muñeca, la opción más recomendada para las personas mayores. Ahora bien, son más complicadas de colocar, además de menos precisas. Para que funcionen bien habrá que colocarlas a la altura del corazón, y aun así habrá ciertos modelos que no sean demasiado fiables.
Un tensiómetro de brazo debe de tener un tipo de ajuste correcto; primeramente habrá que sopesar que el manguito sea adecuado para adaptarse a la circunferencia del brazo (debe de cubrir el 80% de la circunferencia de la parte superior del mismo). Además, el brazalete debería tener un ancho que cubriera, por lo menos, 2/3 de la distancia que existe entre el codo y el hombro.
Si vamos a comprar un tensiómetro de muñeca, estos tienen una correa ajustable que también debe de adherirse bien al brazo de cada persona.
Si te has comprado el Riester tensiómetro para controlar ciertos problemas de salud, entonces es muy importante que trabaje con memorias; es decir, que tenga la capacidad para recordar las mediciones. Algunos modelos pueden guardar pocos registros, mientras que otros bien podrían superar las 100 mediciones.
Suponen un buen recurso para ver cuál es la tendencia de nuestra tensión; si va subiendo o bajando mucho, nos pondremos en contacto con el médico para que nos ayude.
Si va a usar el aparato más de una persona, debería de tener varios perfiles para registrar la medición de cada uno por separado.
Es deseable comprar un Riester tensiómetro que cuente con función de alarma; es decir, que nos indique cuando los valores están por encima, o por debajo, de lo normal. Interesante función para todos aquellos que no se aclaren con los números.
Cuando hayamos sopesado todos los criterios anteriores, habrá que ponerse a analizar de forma detenida el precio.
Existen modelos más o menos económicos, con diferentes prestaciones. Para evitar tirar el dinero, asegúrate de que el aparato tenga exactamente lo que buscas.