¿Qué tipos de muletas ortopédicas existen?
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Cuando hablamos de muletas nos referimos en una herramienta que ha sido diseñada con el objetivo de conseguir que el antebrazo pueda recibir la sujeción necesaria. Normalmente son utilizadas para aquellas personas que tienen algunos problemas a la hora de realizar ciertos movimientos en las extremidades inferiores: tanto de manera permanente, como si se está recuperando de una determinada lesión.
Dependiendo de las necesidades de cada paciente, podrán elegir determinados tipos de muletas, cuyas características deberán ser evaluadas con antelación.
En esta sección podrás encontrar toda una gran cantidad de diferentes tipos de muleta y, si echas un vistazo a la ficha técnica de cada una de las propuestas, podrás elegir la mejor opción.
Y si tienes algún tipo de duda, tan sólo tienes que ponerte en contacto con nosotros para que te echemos una mano.
Consideraciones a tener en cuenta a la hora de elegir distintos tipos de muletas
Tanto como si vamos a necesitar usar muletas, como si las necesitamos comprar para un familiar, hay que tener en cuenta diferentes aspectos como si se va utilizar por una lesión (una fractura, un posoperatorio, un esguince) o bien por algún motivo de inestabilidad.
En el caso de que se vayan a utilizar para períodos cortos de tiempo, podría bastarnos las muletas clásicas siendo las más simples. Sin embargo, en el caso de que se les vaya dar un uso más prolongado, entonces deberíamos centrarnos en que la muleta tuviera forma anatómica para poder prevenir la aparición de dolor en el brazo o en la muñeca.
Estos son los principales tipos de muletas que existen:
Muletas plegables: Suelen ser la opción más popular ya que han sido diseñadas para poder llevarlas a cualquier parte. Además, si en un momento dado al paciente ya no le hace falta, la puede plegar y guardar tanto en una bolsa, en el maletero del vehículo, en una funda especial…
Muletas con amortiguador: Este tipo de muletas disponen de un amortiguador encima de la zona de la contera minimizando el impacto del bastón en el momento en el que éste se sitúa en el suelo cuando estamos caminando. La gran ventaja de ello es que prevendrá lesiones en las articulaciones de las extremidades superiores.
Muletas con empuñadura plegable: Estas otras muletas se suelen complementar con las del primer tipo haciendo que sean todavía más sencillas de utilizar y adaptándose exactamente a la mano del usuario.
Muletas de apoyo en antebrazo con diferentes ángulos: Su uso no es tan habitual. Se suele utilizar cuando la mano del paciente no puede soportar el peso de todo su cuerpo. Por ejemplo, en casos de poliartritis reumatoide.
Muletas con 4 patas: Si lo que nos hace falta es conseguir una mayor estabilidad a la hora de caminar, existen estas muletas que tienen la habilidad de aumentar la base de sustentación. Minimizarán accidentes y ayudarán a que el usuario reciba siempre el apoyo que necesita.
Cristian Caridad
Mi nombre es Cristian y soy profesor en el ciclo superior Ortoprotésica. Hace 1 año conocí a Iñigo y me comentó que estaba buscando gente para escribir artículos en su web desde un punto más técnico y como siempre me ha gustado dar mi opinión aquí os vengo a ayudar.
